Alfonso VII era
hijo de la reina Urraca (hija de Alfonso VI) y de Raimundo de Borgoña.
A la muerte de Raimundo, su abuelo Alfonso VI le concede el señorío de
Galicia, del que será nombrado rey en 1111 por sus partidarios, tras la
muerte en 1109 de su abuelo Alfonso VI. A la muerte de su madre Urraca,
en 1126, heredará el trono de León y Castila.
Al inicio de su reinado tuvo que hacer frente a las pretensiones
navarras de ampliar su territorio a costa de los dominios castellanos,
a la vez que trató de recuperar los territorios al este del Carrión,
dominados por los navarros. Esta tarea se vio facilitada por la muerte
de Alfonso I el Batallador, que supone la separación de Aragón y
Navarra, y que permitió a Alfonso VII anexionar Nájera y La Rioja.
Con victorias se cuentan también sus incursiones en territorio
musulmán, llegando en 1147 a Almería a la que retendrá bajo su poder
durante diez años, siendo luego recuperada por los almohades.En1135 se
hizo coronar emperador en la catedral de León, afirmando así su
supremacía sobre el resto de reyes hispanos. Durante su reinado se
produce la independencia del reino de Portugal, que fue reconocido por
Alfonso VII en 1143.
Alfonso VII muere en 1157, cerca de
Despeñaperros, huyendo de la derrota en Almería a manos de los
almohades. Su muerte supone una nueva división de su reino, pasando
Castilla a manos de Sancho III y León a manos de Fernando II.